Esta es la epopeya de 5 amigos que a principios de 1962, a lomos de sus Montesa Impala recorrieron más de 20.000 kilómetros por África durante 100 días.
Oriol Regás, un conocido empresario barcelonés apasionado de las motos y la aventura, propuso a un grupo de amigos un viaje muy especial: atravesar África. Lo que a principios de los años 60 parecía una utopía, por no decir una locura, fue tomando forma gracias a la casualidad: pudieron contar con el apoyo de Montesa, que por aquel entonces acababa de sufrir la separación entre Pere Permanyer y Paco Bultó, que se marchó, junto a otros técnicos de la casa, para crear la mítica Bultaco, con una orientación mucho mayor hacia la competición.
Así, Oriol Regàs (el promotor de la aventura y tristemente el único fallecido a lo largo de estos años), Rafa Marsans, Tei Elizalde, Enric Vernís y Manuel Maristany (fotógrafo y escritor, posteriormente hizo el reconocido libro sobre el viaje), consiguieron que Montesa sufragara parte de la aventura (muy acertadamente, estos vieron que publicitar este viaje podría potenciar su marca y hacerle de paso sombra a la moto estrella de Bultaco, la Metralla). Así, les dio 3 prototipos de la Montesa Montjuïc, que tras la epopeya ya nunca abandonaría el mítico nombre de Impala. Por cierto, el nombre fue elegido por los aventureros para que los de Bultaco no sospecharan nada acerca de la expedición.
Tal y como explica Manolo Marystany los preparativos fueron largos, e intensos. Enseguida no pararon de llegarnos cantidad de cosas para llevarnos al viaje, unos Barbours, una tienda de campaña inmensa, y otros mil trastos y chismes que hicieran nuestro viaje más fácil, incluidas latas de comida preparada, guiso de canguro, entre otras referencias. Así, y durante 3 meses, con tres motos, Baobab, La Perla y Luchiernaga, un Land Rover de 2ª mano con matrícula andorrana llamado Kiboko y un presupuesto de 8 millones de pesetas siguiendo la ruta de 20.000 kilómetros entre Ciudad del Cabo-Desierto del Gran Karoo-Johannesburgo-Cataratas Victoria-Estepa Masai-Lago Victoria-Sudán-Asuán- El Valle de los Reyes-Alejandría-Bengasi-Túnez-Marsella-Andorra-Barcelona. Atravesaron un continente con todo lo que esto conlleva: pistas de barro, una guerra civil en Sudán, el desierto, tribus aisladas del siglo XX….toda una odisea.
La Montesa Impala
Como sucesora de la Montesa Brío, Leopoldo Milà (padre de 2 reconocidos periodistas), el discípulo de Bultó que se quedó en Montesa, diseñó una monocilíndrica de dos tiempos, de 175 centímetros cúbicos y 10,5 caballos de potencia a 5.500 rpm. Pesaba 90 kilos y llegaba a los 110 kilómetros por hora.
La novedad es que se trataba de la primera Montesa con un motor monobloc —el motor y la caja de cambios formaban un conjunto—; además, la transmisión primaria era de engranajes, en lugar de la clásica cadena y el sistema de embrague multidisco se activaba con palanca. Desde entonces aquella moto constituyó la base mecánica de todas las Montesa, una moto con merecida fama de dura y resistente, más que fiable.
Se fabricaron unas 60.000 unidades de todos los modelos de Impala, pues hubo versiones deportivas, de montaña o de cross, por ejemplo, siendo un éxito rotundo. Hasta llegó a Estados Unidos: Steve McQueen o John Wayne tenían una.
Revisando la epopeya de aquellos 5 locos, vemos el reflejo de una época dorada de lo que fue la industria motociclística catalana y por extensión española (Derbi, Sanglas, Montesa, Bultaco, Ossa..), referente mundial en la moto de campo y también en circuito y paseo, hasta la irrupción devastadora de las motos japonesas.
En 2012, aprovechando el 50 aniversario de la gesta, se realizó un documental, que es el que aquí incluyo. En el 2º vídeo, se relata otra experiencia: ese mismo año, el equipo de Top Racing Show organizó la expedición Operación Impala Dakar sobre 3 motos restauradas, con el objetivo de unirse en el desierto de Copiapó a los participantes del famoso Rally. Un trayecto de 4.500 km, de Iquique a Santiago, atravesando el desierto de Atacama y los Andes, consiguiendo de paso el récord de altura en el Tatio de 4.521 m.
Fuentes: Impala, DocumentalesCAT, gaceta.es, El País, hoy.es
