Descubrí a Óscar Llorens navegando por Behance, una de las reinas de la autopromoción y punto de encuentro de artistas y tendencias. Me llamó la atención por la curiosa mezcla de estilo barroco y frescura propia de un estilo marcadamente contemporáneo, casi caricaturesco, en el que lo mismo simultanea trazos curvos y suaves con colores oscuros -en todos los sentidos- o tonalidades pastel y un leve trasfondo melancólico.
Me gustó desde el primer momento y decidí investigar; contacté con él y dejando a un lado su marcada humildad resulta que acabé encontrando a uno de los mejores referentes nacionales de la iustración y el diseño: este madrileño comenzó trabajando en diferentes agencias de publicidad para al poco acabar volando solo en plan freelance, hecho que no la ha ido nada mal viendo el resultado con trabajos para Coca Cola, Mercedes, Lacoste, Coronita, Circo del Sol, Red Bull, Ricard, San Miguel, Schweppes, Fiat, Movistar, Vodafone, Mini, Atlético de Madrid, Cruzcampo, Naciones Unidas…sí, has leído bien, sus ilustraciones para el club colchonero son muy apreciadas por todos los aficionados del club.
Ha trabajado también en las mejores revistas y publicaciones a nivel mundial: The Washington Post, Marie Claire China, Vanity Fair, ABC, Yorokobu, Yoga Journal Moscú, IDN Hong Kong, DPI Taiwán, Calle 20 …
Se puede decir que ya ha expuesto por todo el mundo, desde galerías de Ciudad de México a Nueva York pasando por los tranvías de Lisboa, y hemos visto sus dibujos en portadas de revista, vallas publicitarias y carteles, pero también en otras superficies como una tabla de kite surf (para la campeona del mundo, la española Gisela Pulido). Pero son sus proyectos personales (a los que dedica el escaso tiempo que le queda entre encargo y encargo profesional) los que le siguen proporcionando «el argumento principal para captar clientes». «Lo mejor de ellos es la total libertad con la que trabajo», añade. Al ponerse a dibujar sin un objetivo concreto, sin las ataduras del encargo, es muy probable que en el papel aparezcan algunas de sus criaturas y personajes surrealistas: «seguramente me salen por la cultura visual de la gente de mi generación. Por los dibujos que veíamos y leíamos cuando éramos pequeños».
Todos esos monstruitos son una parte esencial del trabajo y el estilo de Llorens: «imagino que las formas de mis personajes y la composición de mis ilustraciones hacen que se reconozca fácilmente mi trabajo». Y eso es algo esencial para un ilustrador, en su opinión.
Por último, Llorens es uno de los pioneros, en esto del diseño, en mostrar al público todo lo que hace en redes sociales. Desde los primeros bocetos o pinceladas de color, al barnizado de un cuadro de grandes dimensiones. Con más de 13k seguidores en Instagram, el ilustrador reconoce que las redes «son más importantes de lo que me gustaría, se ha convertido en una herramienta más de mi trabajo, tanto de promoción como de difusión».
Fuentes: cocteldemente.com, tagoartwork.com, yorokobu.es, oscarllorens.com, abc.es, behance.net, elmundo.es